Protagonizado por Montgomery Clift, como el doctor vienés Sigmund Freud, y Susannah York, la película recorre los primeros años (1885-1890) de la biografía del famoso científico que estudió las enfermedades mentales y es considerado como el padre del psicoanálisis. Con tan solo 29 años, Freud se daba el lujo de confrontar a su maestro Meyniert, y muy pronto su asociación con el médico Josef Breuer (Larry Parks) lo convirtió en uno de los más notables investigadores sobre la histeria. Después, la neurosis o la interpretación de los sueños, entre otras, lo convirtieron en uno de los más fuertes exponentes de las nuevas teorías
psicológicas.